Limpieza macrocósmica

Ay cabrón como me duele la baja espalda, casi la cola!!! Traigo un tirón con ardor y punzada concomitantes que ya no me deja ni curvarme a gusto. No me puedo quedar en la misma posición por mucho tiempo o se me entiesa el pentríceps, el músculo ese que esta por donde el oblicuo, el que parece lonja, pero nel es músculo. Je.

Pase los últimos días del 2008 y los primeros del 2009 limpiando a conciencia mi casa y aaaay! Como es difícil limpiar a conciencia cuando careces de ella!!


Mi casa, bueno la de mis papás, se limpia todos los malditos días. Diariaputamente se tiene que barrer, trapiar, aspirar (por donde se ve, pero no le digan a mi jefa, jeje) y demás nimiedades. Pero la limpieza machina, ‘onde mero se tira de todo un poco y donde te das cuenta que hasta el polvo tiene polvo es menos común y ps oobvio nadie se anima a hacerla; por eso, tiempo ya, desde la última vez que se limpió tan dulce nido.

En los viejos tiempos, mis padres tenían más energía y mi hermano y yo éramos forzados. Pero la energía se acaba, los achaques se intensifican y claro… mi supermegamortalinventada alergía al polvo que despuecito adquirí, junto con la eterna huevonada y chancludez de mi hermano convirtieron a mi casa en almacén, acá tipo bodega de central de abastos.

Es increíble la cantidad de chucherías, porquerías y demás “ías” que uno acumula con los años y que no se van por distintas razones:

Algún valor sentimental.

Hermano chancludo: “Noooo, no me tires mi boleto de los cinemas Ermita, iraaaa…es de cuando fui a ver la del Día de la Independencia con…con…ps con una que fue mi novia.
Yo: Aaay no…mira carnalito, es un pedacito de papel casi ilegible que estaba tirado atrás de un mueble, es de un cine que ya ni existe, de una peli de hace más de 10 años, que fuiste a ver con una niña que, no solo ya no es tu vieja, sino que ya ni te acuerdas como se llama!!
Hermano chancludo: Ahhh, ps sí, pero orita me acorde de ella.



Porque uno jura que lo volverá a usar.

Yo: Uy, esta playera me latía un buen!! Ya esta viejísima, no-maa, hace años que no me la pongo…mmmm…se va!
La mia Mamma : Ay, pero si esta buena y te gustaba un chorro, por eso la guardaste que no?
Yo: Efectivamente mi querida jefa, pero ya no me la voy a poner, íra! Tiene una mancha de pintura ‘onde mero queda la shishi…mmmm…me pregunto….¿cómo llegó ahí?
La mia Mamma: Ahh, ps no la tires, agárrala pa’pintar.
Yo: Aaaaaaaaay, peee-ro claaaa-ro!! ¿Cómo no lo pensé antes? Me la voy a poner ora que vaya a terminar de pintar el pedido de las tres casas que me faltan ó para cuando termine el óleo de la próxima cena que me encargaron, ó.. no! Ya sé! Pa’ora que eche el colado no?
La mia Mamma: Mmmmm, si limpiar te pone de malas, mejor no limpies eh!



Por el futuro potencial de un objeto

Yo: Y este bote que pedo jefa?
La mia Mamma: Aaaaay mira! Ese lo compre cuando vino el Papa por segunda vez.
Yo: Ah, cámara, y que? Te lo bendijo? Traía agua bendita? Tierra santa?
La mia Mamma: mmm, no-no era de leche en polvo, ‘ta bonito no? Déjalo para guardar cosas.
Yo: Oo-se-a, como qué?
La mia Mamma: Ay no sé, luego veo.
Yo: Pero está roto amá!
La mia Mamma: Ahh, pss de maceta.
Yo: No pss será de regadera…ó colador, ó vaporera, ó… no manches jefa! Lo voy a tirar!!
La mia Mamma: Mmmmta, nunca limpias y cuando limpias….


Por olvido

Yo: Uy mira carnal, me encontré un carrito rojo, abajo del roperito.
Hermano chancludo: Ahhh, no manches mi carrito!! Ni me acordaba de él.
La mia Mamma: Ay, ese te lo trajeron los reyes!!
Apá: Que? No, ese te lo traje yo en uno de tus cumples!!
Hermano chancludo: Naaah, es me lo regaló mi tío El Muerto (que así le dicen, y porque el sigue vivito y coleando)

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(ven lo que les digo)

Yo: Ash! A la basura!

¡En serio, maldito complejo de rata que se crea uno guardando todo a su paso!

Y sí, efectivamente, así como limpiar, hay muchas otras cosas que no hago regularmente, pero cuando las hago…las hago bien.

Ahora con el dolorcito este que me dejó un torsón por pararme muy rápido analizo el asunto. Me deshice de cosas a las que me había aferrado mucho tiempo; cartas de amor desde 1990 (diiiii-go, tampoco eran tantas, oosea no crean también tengo mi corazoncito y sí he levantado una que otra pasión acá de cartita), cuadernos, ropa, zapatos (que dependiendo de su estado se fueron a la basura o se salvaron) y demás chucherías que retenía para recordar porque, como dicen por ahí…”Recordar es vivir”.

Solo que sí esta vez me obsesione con la limpieza es porque estoy segura de que a veces “Olvidar es vivir”. Pasarte la película una y otra y otra vez es tan malo e inevitable que te hace imposible vivir y disfrutar lo que sí tienes delante de ti; por eso creo que ayuda sacar de tu vida el recuerdo físico. El mensaje al inconsciente es bastante claro:

Deja de aferrarte al pasado y pa’fuera lo que ya no sirve.

Pero no es fácil, eh! ¡Na-da fá-cil! , pero una vez que lo logras te deja una…digamos…linda sensación; el saberte capaz de deshacerte de cosas lindas atesoradas por años, seguro hace menos complicado el deshacerte de las malas de hace tres o del año que termina, que no?

Y como bien reza el dicho “Todo cabe en un jarrito sabiéndolo acomodar” si nuestro jarrito esta bieeen llenote; y pa’cabarla de joder, llenote de caquita, no podremos acomodarle todas las cosas buenas por venir.

Por eso, si logran sacudirse el piojito y la chancludez, al menos una vez cada…digamos…5 a 7 años (porque ps tampoco) y sacar toda la basura de su vida les va a redituar; pues es energética, esotérica, metafisica y fenshuigmente positivo…o alguna Waltermercades así.
Y si no creen en esas mamadas de menos su casa se verá más grande y limpia, como la mía.